sábado, 23 de mayo de 2009

Se ve a la persona rebelde, a quien no acepta lo establecido, a quien busca una opcion alternativa como una persona confundida, caotica, complicada, y problemática, y tiene que ser asi

Se ve a la persona rebelde, a quien no acepta lo establecido, a quien busca una opcion alternativa como una persona confundida, caotica, complicada, y problemática, y tiene que ser asi.
Se ve al rebelde asi porque es una persona que piensa, no esta conforme con la situación actual, con el contexto que vive, sabe que algo anda mal, sabe que esta todo armado para que se beneficien los poderes dominantes, entonces busca opciones alternativas, opciones problematicas para el sistema, caminos alternativos a lo establecido, esto hace que la persona sumisa que “cree” en un sistema que “lo protege” sienta miedo, miedo de que su “seguridad” se vulnere y brinde su apoyo al poder dominante, quien no lo tiene en cuenta, no le interesa, lo trata como un mendigo dandole limosnas a cambio de toda una vida de servidumbre esclava.
Pero a esta persona que trabaja para el sistema le gusta la limosna, es un mendigo del bienestar, aportan, cumplen y trabajan cincuenta años para conseguir un monton de ladrillos apilados, una educación ficticia, una solvencia economica irreal y un sistema de salud deficiente que crea dependencia mas que bienestar.
El rebelde esto lo sabe, sabe que de la torta, en el caso de “hacer las cosas bien”, le van a llegar las migajas, que los “dueños del poder” son golosos, que si tiran las migas es porque menos no pueden dar sino pierden la “fe” de sus seguidores. El rebelde sabe que todo esta diseñado para que la persona honesta y buena nunca tenga una remuneración realmente acorde a su trabajo, aporte y capacidad, entonces busca opciones alternativas que lo remuneren siendo honesto y bueno.
Te atan con grilletes los pies... pero te ponen una migaja adelante, cuanto mas atado estas mas migajas recibis.
En un ejemplo de “educación”, la persona cursa estudios primarios, seis años en los cuales no esta ni cerca de ser una persona productiva a los ojos de la sociedad, son seis años de “formación basica”, después viene el secundario, cinco años mas donde el sistema “te da la oportunidad” de que vos puedas ver que tendencia tenes, si al arte, a la economia, a la quimica, etc… ya con doce años de estudios y aportes, la persona todavía no recibe remuneración alguna, al contrario, tiene que aportar para recibir nada, luego vienen estudios superiores que te exigen ser mas sumisa, ser mas estupida, tener la cabeza mas cerrada, llenarla de datos inútiles para la vida real, y la remuneración sigue siendo nula, pero como objetivo esta “el titulo”, un papel hecho en masa que lo cierto es que no te hace mejor profesional en tu actividad.
Luego de diecisiete años de aportes no solo economicos sino tambien de fuerza de trabajo y capacidad, la persona no recibio ni un peso, recibio titulos ficticios, recibio migajas a cambio de una vida de devocion.
Y eso no es todo, después de estos diecisiete años de estudio y adecuacion al sistema, la persona tampoco esta capacitada para trabajar de lo que estudio y le gusta, tiene que ganar experiencia laboral entonces esta destinado a trabajar por menos plata de lo que deberia por “inexperto” y a seguir “capacitandose”, dando mas tiempo y fuerza de trabajo.
Entonces para que son los titulos? Después de diecisiete años todavía no sirve, pero la migaja cambia de forma, antes eran titulos que cumplian con el ego de “ser” tal cosa a los ojos de la sociedad, ahora es una pequeña remuneración y “tener la oportunidad” de trabajar de lo que estudio, pero eso si, no hay que dejar la capacitacion porque sino todos esos años fueron en vano y cualquiera puede adelantarse.
El rebelde entiende esto, entiende que el sistema no da oportunidades reales, que por cada “oportunidad” que da, hay un pacto de vida, algo asi como “yo te doy oportunidades” vos dame tu vida integra, dame desde tu infancia hasta tu muerte y yo voy a seguir dandote pequeños agasajos.
Eso es lo que son, limosnas, no crean bienestar, crean mas necesidad, no dan oportunidad, sino que ocultan las oportunidades, hacen que uno vaya detrás de algo que nunca va a ser satisfactorio y que siempre va a exigir mas, es un vicio.
El rebelde cree mas en si que en las oportunidades que puedan venir “de afuera”, sabe que la magia la tiene el y no se va a dejar comprar por banalidades, el rebelde sabe que el sistema no le va a dar nada que el no pueda conseguir y con menos ataduras.
Y claro que a los ojos del estupido el rebelde es un ser caotico y problemático, rompe con las estructuras, no acepta limosnas, no tiene miedo, no necesita que “le den” seguridades, el sabe que tiene lo que necesita dentro de si, y nadie puede poner en riesgo su seguridad por eso no le pide favores al diablo y no se doblega para satisfacer su ego.
Esto a la gente le asusta, que algo se salga del “orden establecido” pone en riesgo sus intereses, no confia en si mismo y sus potencialidades, depositó toda su vida a intereses ajenos y eso es lo que siente como seguridad propia y cualquier cosa que ponga en riesgo sus “logros” es digno de descalificar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario